El alcoholismo es una enfermedad mental crónica y progresiva que requiere de tratamiento especializado para su recuperación. Pero además, el consumo de sustancias en ocasiones va acompañado del desarrollo de otras patologías: es la llamada patología dual; en este post vamos a conocer más acerca de las enfermedades mentales derivadas del alcoholismo
Contenido
Patología dual y consumo de drogas
Los pacientes con patología dual están más limitados en cuanto a capacidad mental se refiere, y requieren más recursos terapéuticos para su recuperación que quien padece adicción. Esto les hace más vulnerables al riesgo de suicidio, a quedarse sin hogar y a sufrir otros problemas legales o médicos.
Lo cierto es que los pacientes psiquiátricos tienen mayor riesgo de ser drogodependientes y los drogodependientes tienen más riesgo de sufrir problemas psiquiátricos.
Un estudio reciente, el NCS (National Comorbidity Survey), ha utilizado entrevistas psiquiátricas en más de 8000 personas de 15 a 54 años de edad, y ha encontrado que las personas con adicción tienen más prevalencia de sufrir trastornos psiquiátricos. En el caso de las mujeres, según dicho estudio, los trastornos más frecuentes fueron el de ansiedad y el de ánimo; y en el caso de los hombres, el trastorno comórbido más frecuente fue el de personalidad antisocial.
Entre un 30% y un 70% de personas alcohólicas sufren trastornos de ansiedad y de personalidad, depresión y fobias. En general, un 60% de drogodependientes presentan patología dual.
Enfermedades mentales derivadas del alcoholismo: Trastornos psiquiátricos
Los trastornos psiquiátricos pueden conducir al alcoholismo ya que pacientes con síntomas psiquiátricos pueden recurrir a beber a modo de auto medicación de sus síntomas de ansiedad. Asimismo, el abuso de alcohol contribuye al desarrollo de síntomas psiquiátricos (como deterioro de la expresión emocional, síntomas de ansiedad, depresión y trastornos de conducta que derivan en desadaptación social).
Lo esperanzador de estos síntomas es que está comprobada su remisión semanas posteriores al abandono del consumo de alcohol. Según el DSM-IV (clasificación diagnóstica psiquiátrica) los trastornos psiquiátricos inducidos por el abuso de alcohol son:
- Delirium (tanto por intoxicación como por abstinencia)
- Demencia persistente
- El trastorno amnésico persistente
- Ideas delirantes o alucinaciones – Trastorno psicótico
- Trastorno del estado de ánimo
- El trastorno de ansiedad
- Los trastornos sexuales
- El trastorno del sueño
Alcoholismo y depresión
El abuso de alcohol puede inducir estados depresivos graves. Síntomas depresivos que en caso de desintoxicarse de la sustancia desaparecen durante las 4 a 6 primeras semanas de recuperación. Según estudios, a las 3 semanas de abstinencia los pacientes alcohólicos mostraban una reducción de un 50% de los síntomas depresivos.
Por otro lado puede darse depresión en el proceso de recuperación de adicciones por el impacto emocional que puede suponer renunciar al consumo de sustancias o la pérdida de relaciones interpersonales.
El 80% de pacientes alcohólicos presentan algún episodio depresivo en su vida durante el consumo. Para diferenciar cuándo la depresión es primaria o inducida por el consumo debemos explorar posibles antecedentes de posibles trastornos afectivos previos al alcoholismo:
- Ansiedad en la infancia
- Fobias
- Reacciones maníacas
- Antecedentes familiares de trastorno bipolar.
Por otra parte, los suicidios son más frecuentes en pacientes alcohólicos que en el resto de la población, suponiendo entre un 15 y un 25% de suicidios los que se llevan a cabo por parte de alcohólicos.
Alcoholismo y enfermedad mental grave
El alcoholismo es el trastorno mental comórbido más frecuente en personas con enfermedades mentales graves como la esquizofrenia o el trastorno bipolar.
Según el estudio citado anteriormente un 34% de esquizofrénicos y un 43% de bipolares sufrían alcoholismo frente al 17% de la población general.En el diagnóstico dual es preciso tener en cuenta la edad de inicio de la dependencia de alcohol, la edad de inicio del trastorno psiquiátrico, la edad de la primera abstinencia prolongada (más de 3 meses), así como la evolución del trastorno psiquiátrico en cuestión.
El diagnóstico de patologías duales no está exento de dificultades, ya que los efectos agudos del consumo de sustancias pueden parecer síntomas de algún trastorno psiquiátrico determinado.
Por poner un ejemplo, puede pasar que la impulsividad derivada del consumo de cocaína se confunda con un trastorno de control de impulsos o con determinados trastornos de personalidad. Asimismo, la abstinencia causa síntomas similares a la depresión.
Debido a su importancia es necesario definir protocolos de atención en patología dual, ya que los pacientes con psicosis, trastornos afectivos, trastorno de déficit de atención e hiperactividad, trastornos alimentarios, trastornos de personalidad graves y/o adicciones sin sustancias, deben ser atendidos por profesionales expertos en este ámbito.
Bibliografía
Casas, M. y Guardia, J. (2002). Patología psiquiátrica asociada al alcoholismo. Revista Adicciones 14(1).
SEPD (2015). Libro blanco. Recursos y necesidades asistenciales en patología dual.
Recuperado de: https://patologiadual.es/docs/libro-blanco-recursos-asistenciales-pdual.pdf

Redactora de comunicación y Community Manager en el Instituto Castelao.
Sufro de alcolismo y en las noches tengo sueños perturbadores y pesadillas
Si necesitas ayuda puedes llamar a los teléfonos que aparecen en nuestra web: 900505100 o al 628436325.
Saludos.